Lamentamos informar a la comunidad que se encuentra cerca nuestro, que el pasado jueves 13 de marzo falleció Mario Mansilla, cuyo hijo Jorge a los 22 años perdió la vida en Cromañón.

Mario arrastró una fulminante enfermedad a la cual había hecho frente valientemente, llegando a concurrir a las marchas en silla de ruedas. Además, la esposa de Mario, Mirta -mamá de Jorge- había fallecido unos meses atrás, también producto de las secuelas que les dejó el pos-Cromañón.

La combinación de muerte, dolor, negligencia, corrupción, impunidad, indiferencia, falta de atención e incumplimiento de los responsables, lentitud e incompetencia de la justicia y por sobretodas las cosas, la incapacidad de los gobernantes de hacerse cargo lo que sus políticas producen. Hoy, las muertes de Mario y Mirta se sumaron a las de las mamás de Liz Márquez, Diego Fernández, los dos sobrevivientes y otros familiares que no pudieron resistir las consecuencias que Cromañón les trajo a sus vidas. Ellos también son víctimas de Cromañón, lo mismo que los 194 jóvenes que fallecieron el 30 de diciembre de 2004.

Nosotros saludamos a quienes siguen luchando por un poco de justicia y por el NO al Olvido. Así intentaremos honrar la memoria de los que no están.